Wyatt Byrnamm, qué joya

miércoles, 2 de julio de 2008

(...)No siento un punto de inicio, no veo las posibilidades de ira, resentimiento, frustración o melancolía; puedo ver, con cierta tristeza, valga decirlo, cómo las imágenes de todas las emociones más viscerales pasan frente a mí, sin instruirme. También puedo ver, y en esto valdría la pena detenerme un poco, que tampoco puedo hacerme un escenario mental de un posible desenlace. Tengo desventajas insalvables, casi naturales. Naturales, de hecho, sí. No veo hacia donde habría de dirigir un repentino movimiento, algo simple. Un sujeto de repente se entera de la existencia de otro ente que le está esperando en algún punto del espacio, entonces resuelve levantarse y correr hacia ese punto. Realmente no resuelve, obedece. No veo muchas cosas, y esta relatoría de daños no lo es en realidad. No siento la diferencia entre estar aquí y estar en otro sitio.


[Visto en este blog]

Es increíble Byrnamm.

2 comentarios:

sirako dijo...

Wyatt Byrnamm es como Habedero. Inconseguibles.

Anónimo dijo...

tú me asustas, tenemos un nombre en común, la afición por los carritos del super y muchas ideas así que he leído varias veces en tu blog. Y me apetece en exceso.
No pretendo ser una de esas personas que con tres líneas leídas ya creen encontrar su alma gemela del internet. Se que hallar similitudes es lo más fácil del mundo por este medio.
Pero me caes bien. Lo que me dejas ver aqui, me cae bien.

 
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