Morena Mia

sábado, 30 de agosto de 2008

Acabo de llegar de un día bastante ocupado. Los días ocupadas me gustan, me distraen de todo. 7 am, GodSpeed You! Motherfucker. Me siento bien, soy una buena mujer. Regresando, terminé mi ensayo para filosofía de la historia. Libro aburridísimo y, aún así, saqué 5 hojas, soy un genio. Ya después estaré llorando un cero. Lloramos los ceros, el tiempo perdido (para luego ir en su búsqueda). Luego, clases. Me pasa algo en clases, no puedo concentrarme. ¿Te ha pasado, querido lector, que hay cosas que simplemente te despegan de la realidad? No puedo decirlo, porque lo que pienso no es cierto. Si lo expreso, de cierta manera lo hago más real, más verdadero y me empiezo a confundir. Este tipo de ideas, las que se impregnan en tu pensamiento, son de las peores metástasis mentales. De repente, con una jeringa, inyectas algo entre el cerebro. No pasa naa, hasta que imaginas cosas y, de repente, el cerebro se nubla, junto con la mente, la mirada. Creo que así funciona el malviaje. No puedo dejar que me domine. El peligro de ser uno mismo el enemigo. Y cada noche vendrá una estrella a hacerme compañía.

Después, vi a mis amigos. Mis amigos rulean, porque me quieren y yo les quiero. Todo terminó en un concierto, bebiendo baileys con kalhúa y amaretto. No entiendo qué le ve la gente a beberse jarras y jarras de cerveza. Creo que soy una persona aburrida, pero la cerveza no me agrada. Lo que tomo con cockteles y, de lo bueno, poco. Creo que me estoy haciendo más popof de lo que ya era. Ja, eso qué.

Ahora escucho a Miguel Bosé, mientras me preparo para dormir. Me compré una pijama, eso me hace feliz. No he hecho nada, eso también me hace feliz. No me pone mal, yo intenté. No seré suficiente, pero traté. Eso no me hace feliz, pero es bueno saberlo.

Lloramos por el tiempo perdido, por las personas perdidas. Por la música, por el concepto vacío. Como el ciego que no entiende el rojo, creo que jamás entenderé qué pasó.

2 comentarios:

sirako dijo...

a mí en general me cuesta entenderlo todo, pero soy bastante bueno fingiendo que entiendo, como aquel extranjero que se junta con la banda y que después de tres horas nos damos cuenta que no sabe español, pero antes se reía con los chistes, asentía y negaba correctamente...

Octopus Queque dijo...

Jajaja Sirako, tu ejemplo es buenérrimo. Hace mucho, mi papá me contó que en la fábrica donde trabajaba, se chingaban así a los estadounidenses, que cuando estaban paseando por la fábrica, les decían "pasen al siguiente cuartito, pinches gringuitos" Jajajaja :D Pero, lo mio es más que nada la expresión del sentimiento, luego no me entiendo yo :P

 
Design by Pocket Blogger Templates