Pequeñas cosas

viernes, 27 de marzo de 2009

Graciela, de quien soy fans, me dice que nota mi angst con la frase de The Dears, aquella que dictamina que el romance muere a los 22. La verdad, lo que he aprendido, es que muere a cualquier edad, en cualquier momento y es como tirarte, tocar fondo y seguir cavando. La verdad, las cosas podrían ser peor: podrías seguir esforzándote. Pero ahora tienes una referencia (los 22 años), la cual no se fundamenta en nada, pero lo raro es que todo se va concretando para llegar ahí. Pero la esperanza: que ellos estén equivocados.

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Guardo dos compases de respiro.
(...)
Guardo dos compases de alivio.
(...)

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Hay cosas que podrían ser de otro modo.
Hay otras que no.

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Irreversible: El tiempo lo destruye todo.

3 comentarios:

Unknown dijo...

Pues hay crisis a los 20 y el romance muere a los 22? Carajo, me tengo que apurar!

Idalia dijo...

a los 22 años me pasó lo que sucede en las primeras líneas de Sputnik, mi amor de Murakami: "A los veintidós años, en primavera, Sumire se enamoró por primera vez. Fue un amor violento como un tornado que barre en línea recta una vasta llanura. Un amor que lo derribó todo a su paso (...)
La persona de quien Sumire se enamoró era diecisiete años mayor que ella, estaba casada...

Rain dijo...

Es que cuando crees que estás en la punta de lo trágico, plaaf, aparece un destellazo humano. O así lo ve uno: tal vez se apague violentamente o no. Lo que pasa es que sí, aparece.
Lo que suceda luego, quién sabe.

 
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